Mai Treviño presenta su primer libro: Ya no soy morada, me puse colorada
Mai Treviño presenta su primer libro: Ya no soy morada, me puse colorada
Redacción
Teniendo como marco la sala de cabildo de Victoria, Mai Treviño, una joven tamaulipeca, con una trayectoria de 15 años dentro del activismo social; realizó la presentación de su primera publicación; “Ya no soy morada, me puse colorada.
Impulsada por las mejores causas como lo son el bienestar de las niñas en Tamaulipas que viven en situación de vulnerabilidad, en su primera obra, aborda el tema de menstruación y la necesidad de generar políticas públicas que atiendan el tema.
Este 14 de diciembre, tuvo lugar el evento de Mai Treviño, arropada por la Presidenta de la Comisión de Equidad, la regidora Guadalupe Perea Almanza, El Director de Gobierno municipal, Arquitecto Enrique Calderón Peña, quien represento al alcalde Eduardo Gattas, líderes sociales, la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos en Tamaulipas, Olivia Lemus, regidores, entre otras personalidades como el cronista de la ciudad, Francisco Ramos Aguirre.
La Presidenta de la Comisión de equidad de género en el ayuntamiento, Guadalupe Perea Almanza, ponderó el interés del Presidente municipal, Eduardo Gattás Báez por apoyar a la juventud y a la cultura, destacando que esto es primordial para el desarrollo de la sociedad que todos queremos.
Así mismo, la regidora destaco la importancia que las mujeres jóvenes como Mai Treviño, sean un ejemplo de lucha social, y que desde la cultura, desde la escritura del voz a temas tan importantes como el ya mencionado:
“Es un gusto impulsar los proyectos de las mujeres jóvenes, porque está a la vista que la sociedad en general es la que gana, que las niñas y las situaciones que pueden afectar su desarrollo deben ser atendidas, por eso aplaudimos desde el cabildo este libro sea un semillero que florezca en una vida mejor”.
Mediante la lectura de su obra, Mai Treviño, dio voz a Valentina, niña que a través de las letras comparte la experiencia de su primera menstruación:
“Valentina no se sentía mujer porque sufalda fuera colorada, solo confundida, porque ella seguía sintiéndose niña. Pero, al ver la sonrisa de su madre decidió callar y aceptar esa “transición” que sus padres tanto celebraban, mientras que ella solo pensaba lo mucho que le gustaba su falda morada”.
Mai Treviño, quien desde temprana edad es activista social, defensora de derechos humanos, abogada con perspectiva de género, se pronuncia porque la salud menstrual, sea un derecho humano que se respete y se atienda en Tamaulipas:
“ Cuando hablamos de salud menstrual, se hace referencia a que sea un derecho humano que se atienda y no solo regalando toallas sanitarias, sino sembrando conciencia sobre que para las niñas el tema no se un tabú que no se toca incluso en el seno familiar”.